Cruzar la República Checa para ir a Alemania es una muy recomendable opción. Si hay disposición de tiempo, el país te sorprenderá con pueblos y ciudades encantadoras y paisajes de lo más original.
Aquí dejo las fotos de dos ejemplos, Kutna Hora, villa patrimonio de la Unesco en el centro de la república, y Adršpach, un parque natural donde los gigantes de piedra retienen las últimas nieves del invierno checo.
Antes de cruzar la forntera, una última parada en Alemania. La ciudad de Bautzen, al sureste del país.
Adršpach, al noreste de la República Checa, cerca de la Polonia vecina. Una auténtica joya de la naturaleza.
Y Kutna Hora. Donde los adoquines te llevan a la más tenebrosa de las Iglesias...
El Osario de Sedlec.
Kutna Hora.
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