Segunda vez en el año, tercera en la vida. A Praga siempre se quiere volver. Mucho más ahora, llena de vida, de luz y de magia.
Saliendo de Eslovaquia.
Estación de tren de Bratislava.
Callejeando.
Navidad en Staromestské Namesti
Antiguo cementerio en Žižkov.
Café-restaurante Maitrea, en la Ciudad Vieja.
Comida vegana en un ambiente budista.
Café Pavlac en Źižkov.
Tranvía.